Pequeñas acciones


Todos han sufrido las altas temperaturas de los últimos días, el calor es insoportable y cuando llueve la cosa se pone peor pues la poca agua que cae solo sirve para sacar el calor del pavimento. A esto, en mi calle debo sumarle que el vecino de diagonal el calor se lo quita es escuchando vallenatos a un volumen tal que aumenta la desesperación del calor y caldea los ánimos de cualquiera y te terminan sacándote el monstruito.  Ese vecino es monotemático y cuando coge una canción se la acaba, termina rayando el disco como decíamos antes de inventarse el CD. Bueno, el tema de estos días repetía mucho una misma estrofa:

Negra si me muero no me guardes luto
El muerto no oye, ni mira ni entiende
Ahora que estoy vivo es que debes quererme
Pues así recibo tus caricias con gusto.

Esto me hizo pensar en que quizás el le estaba mandando un mensaje a su esposa o alguien, estaba mandando su queja al viento a ver si llegaba a su destino.  Y de este pensamiento salte a otro que me mostraba lo importante que son a veces las pequeñas acciones para aquellas personas que nos rodean, pequeñas acciones que no cuestan nada pero que tienen gran valor, como decir buenos días, como  llamar a una persona enferma e interesarse por su salud, llamar a alguien el día de su cumpleaños y desearles nuestros mejores deseos en Cristo Jesús, Una de estas pequeña acciones puede ser la única  que esa persona  reciba ese día   y le habremos reconfortado el rato. Piensen en lo gratificante que es cuando tu pareja te sorprende con un buen detalle, piensa en la satisfacción de los padres cuando los hijos nos demuestran su cariño con acciones llenas de amor, piensa en la cara que ponen los amigos cuando te interesas por sus cosas y les demuestras que para ti son importantes.  Cuando mi madre murió mi dolor de hijo se vio mitigado porque mientras vivió tuve para con ella  muchas pequeñas acciones llenas de amor.  No esperemos que el amigo se vaya para extrañarlo, no esperemos que los hijos estén lejos para demostrarles cuanto los amamos, nunca neguemos una frase de apoyo a  aquella persona, desconocida o no, que parece necesitarla pues hay pequeñas acciones que pueden cambiar la vida de una persona y darle un giro de 180 grados,  pero sobre todo, siempre tengamos en cuenta que debemos actuar con amor, pues sin ese sentimiento las cosas no valen la pena.
Bien lo dice Pablo en su primera carta a los corintios,  capitulo 16 versículo 14
“Todas vuestras cosas sean hechas con amor”
En el nombre de Jesús: Amen y Amen

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