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Mostrando entradas de septiembre, 2010

Buenos momentos que yacian olvidados

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Por no se que cosa me imagine un montón de libros viejos  en mi cumpleaños, y vaya que por conducto de Edgar e Ivan me llegaron varios, entre ellos tres novelitas de vaqueros de las que tanto me gustaba leer cuando era un adolescente. Las leía y cuando lo hacía las cambiaba por otras devolviendo un peso oro, primero en Magangué cuando vivíamos en San Pedro y luego en el parque Santander cuando  ya cultivábamos en Sampués. Recordé muchas cosas sin querer y muchas cosas se repitieron ahora como si agazapadas estuvieran esperando el instante para saltar de nuevo a la realidad. En lo mejor de la novela, siempre llegaba alguien o la fila del algodón se movía, o había que irse a dormir. Recuerdo una vez en el Gimnasio Juvenil que un compañero leía entusiasmado una de estas novelitas en la clase de Español y no se dio cuenta cuando el profesor se le acercó sin que el lo notara y se la quitó, sorprendido el alumno solo pudo decir: "Ñerda, viejo profe, y ahora que iban a decir quien es el

Alcatraz, fuga imposible

Carmen no es que tenga cara de alcaide ni trabaja con el INPEC, pero es guardiana de varios prisioneros condenados a cadena perpetua, a morir tras la rejas: Tiene un loro que solo dice algunas palabras o silba con un silbido raro, una palomita guarumera que cuando canta me recuerda los días del algodón cuando las cazábamos para comer, tiene un pajarito que no se sabe que raza es, si es azulejo o un tusero vulgar, dos morrocoyos condenados a comer bonches mojados y hacinados en un metro cuadrado y como huésped tiene a   Nikita, propiedad de los arrieta royett. Recientemente adquirió un gato que se murió de encierro y ahora ya lo remplazó por otro más afortunado pues anda libre por la casa. Tenía un perro que murió virgen pues lo condeno al celibato. Y eso que Carmen no tiene cara de alcaide ni trabaja en el INPEC.  Como dije los morrocoyos comen bonches pasados por agua; los pajaritos, alpiste, el gato lo que venga y el loro, el consentido, come pan con café o arroz con café, pero el c