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Mostrando entradas de octubre, 2009

Octubre 31, El Aquelarre.

En mi pueblo y en mi infancia nunca supe lo que era un día de brujitas y la razón contundente para esto es que este día no se celebraba en forma alguna. Así que no habían disfraces, no habia niños disfrazados, ni había niños recitando en forma desfigurado el "Trato o Treta" de los gringos castellanizada en Triqui Triqui por su semejanza fonética. Lo que si existió fue el Ángeles Somos del primer día de noviembre, cuando formando hordas acabamos con la despensa de los habitantes del pueblo bajo el canto "Ángeles somos del cielo venimos pidiendo limosna para nosotros mismos", "No me veas no me veas saca el pollo de la batea", "No te rías, no te rías, que mi mochila esta vacía" y no mas, no existían las casas de ají ni las de arroz. En este enlace pueden escuchar la canción de Rufo Garrido Ángeles Somos: http://dl2.musicwebtown.com/njal7/playlists/282771/2925549.mp3 Esto de los disfraces en un pueblo con antecedentes peligrosos era aun mas pel

Buenos conversadores, especie en vias de extincion

Los buenos conversadores son cada vez mas escasos en este mundo donde la gente se aisla en la individualidad de esfera que le brindan un par de audifonos. En una burbuja creada por el sonido que los aleja de el exterior, caminan como sonambulos y cabecean como si la modorra mas tenaz los atacara. Conozco dos buenos conversadores que sin monopolizar la palabra en monologos hacen que el paso del tiempo nos ignore y cuando nos damos cuenta hay que cortar para volver a la realidad dejando obligados las anecdotas, los chascarrillos, los recuerdos y ese viaje al pasado que casi simepre iniciamos y no terminamos. Gracias le doy a mi Dios por permitirme asomarme de vez en cuando a la mente de estos dos personajes que le sacan a la historia la porcion de humor que lleva consigo. Saludos desde mi humilde blog al señor Royett y a Maria Alejandra, amiga de Josefina desde el siglo pasado. Ambos me han hecho reir y ambos me han remontado a esos recuerdos que nos hicieron la vida mas feliz y no n

Imagenes de una bascula romana

Imagen
Agrego aqui las imagenes de una bascula romana para aquellos que jamas conocieron una. Me sorprende que las esten ofreciendo por internet como antiguedades. Igual a esta era la que usabamos para pesar el algodon. Se llamaba romana pues el diseño fue hecho por los romanos en la antiguedad. El porro medidor es ese cilindrico que se se ve con un tornillo para asegurar que no se mueva ese tornillo es el que yo pase por alto

Escuelitas, Mis segundas letras....

En el Colegio Departamental de Bachillerato San Pedro Claver, hice el primero y segundo de bachillerato, este estaba mas lejos aun, a la salida del pueblo hacia Magangué, fue algo parecido a la primaria, a lo mejor por la transición, poco recuerdo de estos dias, alli si se reunió la familia y el gordo debio aceptar estudiar en el mismo colegio que yo, el llegó hasta cuarto allí, entre otras cosas por que el colegio no tenia aprobado el quinto y el sexto pues de laboratorios nada. Asi que les hicieron un grado en cuarto, estaba la juventud pesada de la epoca y recuerdo que ese dia el gordo hizo una fiesta en la casa, como las que el gustaba hacer, con mucha gente y mucha bulla. En el año 74 mi papa decide que el ambiente del pueblo no es el propicio par nosotros y teniendo en cuenta las alternativas que se presentaban, decidió mudarnos para Sincelejo. Para mi eso fue un golpe tremendo, mis amigos y mis amigas estaban en el pueblo, era como desarraigarme, pero lo tuve que hacer. Me olv

Escuelitas, Mis primeras letras, las menos dolorosas

A mi lo que me gustaba era irme a la finca con mi papa, era la libertad del campo la que me apasionaba y no la carcel de un salon de clases. Por eso invente la jornada continua. Mi primera escuelita y donde creo no demore mucho, era en la sala de una señora que decia llamarse Escolastica Dorias, su fisonomia casi no la recuerdo, pero la adivino gruesa y morena, era la escuela de banquito, cada uno tenia que llevar el suyo y cada uno al final de la jornada en la tenia que lelvarse el banquito para la casa. La jornada era de 8 a  12 y de 2 a 4. El que se portaba mal lo dejaban sin almuerzo y de largo, sin la posibilidad de salir a las 12.  El gordo le decia a esta escuela "Escuelita Palito de Abeto" pues en la puerta estaba sembrado un palo de abeto que sombreaba la casa cuando el sol, por las tardes, le daba de frente.  Son pocas cosas las que recuerdo de esta escuelita, solo se que no me gustaba, ahi estudiabamos todos los de la familia. De esta escuelita brinque a donde

Tempestades, y otros fenomenos

"Respeten a la ira de Dios" - así nos regañaba la abuela cuando en medio de la tempestad con truenos y centellas no dejábamos el desorden o nos peleábamos, mas comunmente esto ultimo. Apenas iniciada la función de relámpagos y truenos, mi mama tapaba los espejos y prohibía andar a pies descalzos. Y si era de noche, prendía la lampara y buscaba los fósforos y las velas. En medio de la tempestad debíamos permanecer en un solo sitio callados y quietos y si era de noche, todos nos despertábamos y en veloz carrera nos cambiábamos a las camas de madera que según no transmitían la electricidad.  Mas por desorden que por miedo. En mi casa siempre hubo pensionados, costumbre que se acabo al mudarse mi mama a Cartagena, todos llegaban con su maleta, su cama de spring - de esas que se cierran con todo y colchon - su juego de sabanas, cartones para meter entre el colchón y la malla de alambre de la cama, colchón cuatro golpes, (se llamaban asi pues se le daban cuatro golpes, se ponía

Cumpleaños. Costumbres y tradiciones

En mi casa el dia del cumpleaños podiamos hacer casi que cualquier cosa con la seguridad de ser perdonados o los demas se hacian de la vista gorda. El cumplimentado tambien se volvía un poco mas tolerante y soportaba estoicamente las bromas de los que de hacian un esfuerzo por ser los mas originales en el momento de la felicitación. No teniamos en la sabana ni hemos adquirido aqui la costumbre grotesca de romper huevos en la cabeza del homenajeado, ni invitamos a Pedro Infante a las reuniones para celebrar los cumpleaños con rancheras mexicanas pero si lo despertabamos con pringos de agua en la cara o demasiadas cosquillas u otras cosas inocentes que ahora se me olvidan. El pudin lo hacia y decoraba la abuela, grandes de tres pisos montados en una base especialmente para eso, rebozantes de azucar cuatro equis y animalitos de pastillaje. Luego se hicieron moldes con figura de libros, conejos, guitarras, casi que cualquier figura, hasta un reclinatorio para las primeras comuniones. 

La T.V., el impacto de la imagen

No se cuando vi por primera vez la television, pero fue algo profundamente impactante. En mi pueblo eran muy pocos los televisores, eran grandes aparatos en blanco y negro y con tubos electronicos que encendian desesperadamente. En mi pueblo, tenian televisor mi abuelo, Manuel Arrieta Carmona, El doctor Caycedo, mi vecino, El doctro Mogollon, vecino de enfrente de la cola del patio, Andres Manuel Gamarra y la niña Abbe, Albertina de Teheran. La gente del pueblo enloquecio con las imagenes, indudablemente que era mejor ver a Lupita Ferrer en Simplemente Maria, a oir la descripcion aproximada de su belleza por la radio. La television fue aliento para algunos y decepcion para otros. Para mi, acostumbrado a la radio, vi como muchas cosas se perdieron por no saber dar el paso del sonido a la imagen. Entre ellos Heverth Castro, pues no hubo manera de pasar a los personajes prodigiosos que solo existian en su garganta a una imagen de television donde sus presentaciones consistian en pararse